CENEPA: LA ÚLTIMA GUERRA TERRITORIAL
“Para que el poder fluya, el mundo debe estar libre de trabas, barreras, fronteras fortificadas y controles.
Cualquier trama densa de nexos y relaciones sociales, y particularmente una red estrecha con base territorial,
implica un obstáculo que debe ser eliminado.” (Bauman, Modernidad líquida 2004, 17)
Dr. Napoleón Saltos,Mgs. 1
RESUMEN
Al conmemorar los 25 años de la Guerra del Cenepa, el artículo aborda el análisis del sentido del acontecimiento,
a partir de su genealogía, la pregunta sobre los procesos que cierra y los procesos que abre. La tesis central es
que la Guerra del Cenepa es la última guerra territorial, el cierre victorioso de una larga historia traumática de
límites. Y, a la vez, abre el paso de la frontera Sur a la Frontera Norte, el paso de las fronteras territoriales a las
fronteras globales, el paso a los cambios de la modernidad “líquida”. El cambio político clave es el debilitamiento
de los Estados-nacionales, sometidos a un doble asedio: desde afuera, el asedio del poder transnacional, que ha
instituido una nueva Doctrina de Seguridad Nacional, para resolver la guerra contra el nuevo enemigo global,
post Guerra-Fría, el terrorismo y el narcotráfico, bajo la tutela de los Estados fuertes y el poder americano. Y un
asedio desde adentro, las luchas sociales en medio de la superposición de diversas soberanías y violencias, en el
marco del Estado Plurinacional. Las Fuerzas Armadas están ante el interrogante de su papel en las condiciones de
la democracia en crisis y de los cambios globales; una disyuntiva entre la subordinación a una estrategia que res-
tablece los postulados de las doctrinas de seguridad nacional, para enfrentar la subversión interna; o que busca la
salida en la articulación con las demandas sociales. La conmemoración de los 25 años de la Guerra del Cenepa es
una oportunidad para traer, en espiral, la memoria del pasado al presente, para responder a las preguntas actuales.
Palabras claves: Guerra del Cenepa, Fuerzas Armadas, Estado nacional, Soberanía, Violencia, Cambios globales.
ABSTRACT
In the commemoration of the 25 years of the Cenepa War, the article analyzes the meaning of the event, based
on its genealogy, the question about the processes that it closes and the processes that it opens. The central thesis
is that the Cenepa War is the last territorial war, the victorious closure of a long traumatic history of boundaries.
And, at the same time, it opens the passage from tee South border to the North border, the passage from territorial
borders, the step to the changes of “liquid” modernity. The principal political change is the weakening of nation-
al states, subject to a double siege: from outside, the siege of transnational power, which has instituted a new
National Security Doctrine, to resolve the war against the new global enemy, post Cool-War, terrorism and drug
trafficking, under the tutelage of the strong states and American power. And a siege from interiority, the social
struggles amid the superposition of various sovereignty and violence, within the framework of the Plurinational
State. The Armed Forces are facing the question about of their role in the conditions of democracy in crisis and of
global changes. A disjunctive between the subordination to a strategy that restores the postulates of national secu-
rity doctrines, to confront internal subversion; or that looks for the exit in the articulation with the social demands.
The commemoration of the 25 years of the Cenepa War is an opportunity to bring, in a spiral, the memory of the
past to the present, to answer the current questions.
Key words: Cenepa War, Armed Forces, National State, Sovereignty, Violence, Global changes.
1 wnsaltosg@yahoo.es
INVESTIGADOR INDEPENDIENTE
Artículo enviado: 10/02/2020 - Aceptado: 28/02/2020 - Publicado: Abril 2020.
Revista de la Academia de Guerra del Ejército Ecuatoriano, Volumen 13. Núm. 1 Abril 2020. pp. 20-27
CENEPA: LA ÚLTIMA GUERRA TERRITORIAL
1. Introducción
resultados, para un país que a lo largo de su vida repu-
Conmemoramos los 25 años de la Guerra del Cenepa.
blicana había sido testigo permanente de la pérdida de
Es una oportunidad para reflexionar sobre el proceso
su territorio, implicó para la conciencia y sentimiento
de las Fuerzas Armadas ante los cambios que se han
de los ecuatorianos la mutilación de una parte de sí mis-
producido, tanto a nivel interno como global.
mos.” La derrota del 41 y la firma del Protocolo del Río
de Janeiro fueron “el hecho histórico (…) más traumá-
tico para el país de todo del siglo XX.” (Silva 2005, 90)
2. Lecturas
Un hecho se puede leer desde atrás, del pasado al pre-
La reacción de la sociedad fue no aceptar el Proto-
sente, en términos historicistas, y se produce la des-
colo de Río de Janeiro. La identidad nacional se trazó a
cripción celebratoria de la memoria. O se puede leer
partir de este sentimiento. “La revolución de mayo del
desde el presente, para producir la genealogía del acon-
44, “La Gloriosa”, sería la primera respuesta masiva de
tecimiento2, a partir de la pregunta sobre los procesos
la sociedad a una clase política a la que estigmatizó im-
que cierra y los procesos que abre.
placablemente con el adjetivo de “traidora”. Más tarde,
en los años 60, esa misma clase política capturaría la
Averiguar “el momento constitutivo, el momento
inconformidad y la resistencia de la sociedad, al lanzar
fundacional de un evento histórico. En palabras de Zava-
por medio de Velasco Ibarra la tesis de la “Nulidad del
leta, el momento constitutivo se asienta en el interrogan-
Protocolo de Río de Janeiro”.” (Silva 2005, 89-90)
te: “(…) de dónde viene este modo de ser de las cosas: las
razones originarias” (Zavaleta 1990, 80)) (…); allí se en-
Sobre todo, la identidad de las Fuerzas Armadas y
cuentran los elementos que, desarrollándose, finalmente
el dislocamiento estratégico y geográfico de fuerzas
darán forma a ese modo de ser.” (Accossatto 2017, 171)
se organizaron a partir de este imaginario, el enfren-
tamiento al “enemigo del Sur”, con un vago y difuso
La guerra del Alto Cenepa es la última guerra te-
rritorial del Estado-nacional ecuatoriano, y, a la vez,
sentimiento antiimperialista, ante las imposiciones de
abre la incorporación al nuevo orden geopolítico; el
los garantes y, en particular, de los Estados Unidos, por
desplazamiento desde el ordenamiento en la frontera
sus intereses geopolíticos.
Sur en el enfrentamiento al “enemigo del Sur”, al dislo-
camiento de fuerzas en la frontera Norte, en un reorde-
En los 60 y 70 se complementarían con las orien-
namiento del carácter de la seguridad desde una nueva
taciones de la Doctrina de Seguridad Nacional, que
lógica geopolítica, en el enfrentamiento a las nuevas
ubicaron a la subversión, el enemigo interno, como
amenazas globales. Pero este cierre no se realiza desde
la amenaza principal; por lo cual el dislocamiento de
la lógica de los Estados-nacionales, sino desde el pro-
fuerzas colocó los cuarteles a la entrada de las ciudades
tagonismo de los garantes, el juego de fuerzas globales,
para evitar la entrada de la subversión desde el campo.
encabezadas por el poder norteamericano.
La guerra de Paquisha, en 1981, refuerza el imagi-
nario defensivo en el Ecuador. En “esta jornada de lu-
3. La genealogía
cha que evitó que el Perú consumase sus pretensiones
La genealogía de la Guerra del Cenepa parte de la iden-
expansionistas, mucho tuvo que ver la decidida acción
tidad del Ecuador como una “nación en ciernes”, que
gubernamental dirigida por el presidente Jaime Roldós
no termina por definir sus límites territoriales desde su
Aguilera, que incitó a la Organización de Estados Ame-
propia constitución. Conflictos y guerras con el Perú
ricanos que interviniera conciliadoramente en el conflic-
que encuentran su identidad patriótica en el discurso
to.” (Academia Nacional de Historia Militar del Ecuador
de “la herida abierta”, a partir de la Guerra del 41. Un
juego de espejos que se reactiva periódicamente, de
2020, 38)
acuerdo a los tiempos de las políticas locales de los
El conflicto del 81 tuvo un fuerte impacto económi-
dos países confrontados y los condicionamientos de los
poderes globales.
co, que impulsó el viraje desde el modelo desarrollista
de la década de los 70, hacia el modelo de mercado: “El
Si bien es un proceso largo, recogido en una trau-
conflicto fronterizo con el Perú de 1981, al tiempo que
mática “historia de límites” que muestra el cercena-
agudiza los inveterados problemas de la socioecono-
miento progresivo del territorio nacional, la genealogía
mía ecuatoriana, marca el punto de flexión del proyec-
de la Guerra del Cenepa se puede encontrar más direc-
to reformista y redistributivista de nuestra burguesía de
tamente en las guerras del 41 y del 81.
nuevo cuño. (…) A partir de la Guerra de Paquisha la
balanza se inclina decididamente al enfoque (…) del
“La guerra del 41 nos mostró la imagen de un pue-
modelo exportador-importador propugnado por el FMI
blo vencido, un pueblo de perdedores. Sus desastrosos
y el Banco Mundial” (Báez 2003, 198)
2
“[No hay] nada que se parezca a la evolución de una especie, al destino de un pueblo. Seguir la filial compleja de la procedencia es, por el
contrario, mantener lo que pasó en la dispersión que le es propia (…); es descubrir que en la raíz de lo que conocemos y de lo que somos no
están en absoluto la verdad y el ser, sino la exterioridad del accidente.” (Foucault 1994, 141)
Revista de la Academia de Guerra del Ejército Ecuatoriano, Volumen 13. Núm. 1 Abril 2020. pp. 21- 27
CENEPA: LA ÚLTIMA GUERRA TERRITORIAL
4. El acontecimiento
señala: “En conocimiento de lo relatado, quienes ingre-
La participación de las Fuerzas Armadas en el Gobier-
saban a las Fuerzas Armadas los hacía (sic) imbuidos
no de 1972 a 1978, había distraído a la institución de su
de la firme decisión de impedir que esa triste historia se
misión fundamental, la defensa de la soberanía nacio-
repitiera.” Y concluye, “para 1994 las Fuerzas Arma-
nal. Después del revés del 81, una reacción inmediata
das estaban entrenadas para luchar en cualquier esce-
fue el refuerzo de la orientación profesional dentro de
nario e imbuidas de un espíritu heroico, jerarquizadas,
las filas castrenses y el planteamiento de la necesidad
disciplinadas y cohesionadas.” (Academia Nacional de
Historia Militar del Ecuador 2020, 66 y 68)
de prepararse con anticipación a un nuevo conflicto.
Este espíritu se confirma en las memorias del
A raíz del Conflicto de 1981, quedó entre los milita-
acontecimiento. El General Carlos Patricio Vasco,
res un sentimiento de frustración: “Siempre me pareció
que todos los combatientes quedamos marcados por no
Comandante de la Brigada Especial de combate Eloy
Alfaro, al relatar “La logística de la Guerra del Ce-
haber conseguido los objetivos propuestos, a pesar de
nepa”, señala “las decisiones (…) permitieron que la
que se ejecutaron con relativo éxito todas las opera-
ciones y se tuvieron buenos mandos; pero la decisión
Brigada Especial de Combate Eloy Alfaro cumpla la
misión y sea parte de la estructura militar que recu-
política echó al traste todo el esfuerzo militar y como
peró el honor y la dignidad nacional con un mínimo
siempre, los países garantes dieron la razón al Estado
de pérdidas.” Analiza el papel de la logística y de las
Peruano.” (Vasco 2019)
líneas de abastecimiento, para garantizar el resultado
exitoso. Subraya: Durante la Guerra del Cenepa, “se
Se desarrolla una estrategia planificada: en el cam-
po organizativo, articulación de las diferentes ramas,
materializan las aptitudes, deseos y aspiraciones de
una generación que se preparó con dedicación para
creación de nuevas unidades; en el campo técnico la
recuperar el honor nacional, después de los aciagos
modernización del armamento; y en la preparación y
resultados del año 1981. El permanente y meticuloso
entrenamiento del personal militar, con tropas especia-
entrenamiento que se realizó desde esa fecha permitió
lizadas. Esta planificación tenía el propósito de prepa-
que el personal en todos los niveles jerárquicos ga-
rar las FF.AA. para el caso de producirse otro conflicto,
rantice la eficiencia operativa de cada especialidad.”
estar listos para enfrentarlo con relativo éxito y evitar
(Vasco 2019, 9 y 12)
que se produzca las negativas experiencias del pasado.
Este espíritu penetra también a la sociedad ecuato-
Un equipo de militares-intelectuales, José Gallar-
riana. El largo relato de la “historia de límites” muestra
do, Carlo Magno Andrade, Miguel Iturralde y Paco
un país humillado y el cercenamiento progresivo de su
Moncayo, elaboran una estrategia que integra diversas
territorio. La educación cívica crea un imaginario de
visiones teórico-prácticas, adaptándolas a las condicio-
recuperación de la dignidad y el honor nacional. El pa-
nes concretas del país, para enfrentar a un enemigo más
pel de la sociedad es clave para el resultado del conflic-
poderoso. Es un momento que rompe la continuidad de
to del Cenepa, no sólo como apoyo, sino como recurso
la reproducción de estrategias externas, y se da paso a
estratégico operativo.
la innovación de la estrategia militar de acuerdo a las
condiciones especiales del enfrentamiento con el Perú.
El General Vasco, en el relato de “la logística de
la guerra del Cenepa”, expresa su agradecimiento
Tres elementos claves: la adaptación al terreno, para
“a la población de Gualaquiza que nos acogió con
una ventaja operativa; la alianza con la población, sobre
mucho cariño y nos ayudó a resolver los problemas
todo nativa, en particular en la Amazonía; la estrategia de
que se presentaron en el área de retaguardia; espe-
guerra de guerrillas en el suelo, “que permita aplicar una
cialmente a las señoras que trabajaron todos los días
nueva doctrina de guerra no convencional, en las opera-
en la preparación de las raciones que alimentaron a
ciones que se desarrollan en un medio selvático” (Acade-
los valerosos soldados en combate.” Recuerda “el
mia Nacional de Historia Militar del Ecuador 2020), con
espíritu cívico y patriótico del pueblo ecuatoriano,
apoyo coordinado aéreo y de defensa antiárea.
particularmente el de los niños escolares y jóvenes
de educación media, se sintió con tanta fuerza en el
Las Fuerzas Armadas se reorganizan bajo la misión
frente de combate, que comprometió más a los sol-
de la defensa de la soberanía y la recuperación de la dig-
dados que estábamos defendiendo la heredad territo-
nidad nacional, después de una historia de derrotas. Las
rial.” (Vasco 2019, 9 y 51)
nuevas estrategias y planes de guerra se elaboran y prac-
tican en los Institutos de formación de las FF. AA., parti-
Un signo de la alianza con la población nativa es la
cularmente en las Academias de Guerra del Ejército, de
creación de la Escuela de Iwias Coronel Gonzalo Barra-
la Fuerza Aérea y Naval. Se sigue un plan trazado. Este
espíritu atraviesa al conjunto de la institución armada.
gán: “Con el fin de aprovechar los talentos étnicos pro-
pios de convivir en el ambiente selvático de los nativos
El General José Gallardo, Comandante de las
y colonos, fue instaurada la Escuela de Iwias en 1982,
Fuerzas Armadas durante el conflicto, al analizar “La
para crear posteriormente las especialidades en selva
conducción político-militar de la Guerra del Cenepa”,
con nombres propios de sus lenguas. Esta escuela es el
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CENEPA: LA ÚLTIMA GUERRA TERRITORIAL
ejemplo más interesante, a nivel mundial, de la fusión
El Ecuador contaba con algunas ventajas estratégi-
de las culturas amazónicas con la cultura militar” (Aca-
cas: líneas más cortas de abastecimiento y comuni-
demia Nacional de Historia Militar del Ecuador 2020)
cación, preparación de tropas especializadas para el
combate en selva, alianza con los pueblos indígenas
A diferencia de lo sucedido en 1941 y 1981, en
shuar, ubicación en la parte superior de la Cordillera.
que el Ecuador respondió a la iniciativa ofensiva del
La Guerra del Cenepa es la última guerra territorial,
Perú, en la Guerra del Cenepa, las tropas ecuatorianas
pero aborda algunas estrategias de las nuevas guerras
cuentan con una estrategia definida. Responden rápid-
totales, sobre todo respecto al papel activo de la opi-
amente a la invasión peruana a territorio ecuatoriano,
nión pública y la propaganda a nivel interno y externo.
aceptado previamente por los propios militares peru-
A pesar del desgaste del Gobierno de Sixto Durán, du-
anos, aunque no estaba delimitado oficialmente. La
rante el conflicto se logra concentrar la voluntad nacio-
estrategia peruana tradicional había sido invadir de
nal en torno a la defensa de la Patria, la consigna fue
hecho, luego consolidar su presencia, dependiendo de
“Ni un paso atrás”. La disputa de la opinión pública se
la reacción militar ecuatoriana, que anteriormente era
dio también a nivel internacional.
muy débil. En esta ocasión, cambiaron las circunstan-
cias, las fuerzas militares ecuatorianas reaccionaron
El teatro de disputa de la Guerra del Cenepa se con-
oportunamente, pasando a tomar la iniciativa respecto
centró en 40 kilómetros cuadrados, en el lado oriental
al momento y al terreno.
de la Cordillera del Cóndor, ocupado por las Fuerzas
Armadas Ecuatorianas. El argumento apuntaba a con-
El inicio de la guerra fue el resultado de la crónica
vertir la cumbre de la Cordillera del Cóndor en la nue-
de un conflicto anunciado: a partir de 1990, el conflicto
va delimitación.
en torno al Puesto de Vigilancia Pachacutec, implan-
tado por el Perú en territorio en disputa, y luego el in-
Desde 1994, el Ecuador despliega los puestos avan-
cumplimiento por parte del Perú del “Pacto de Cabal-
zados Cueva de los Tayos, Base Sur y Twintza, en la
leros” firmado el 24 de agosto de 1991, para remover el
zona sin delimitación. El conflicto se inicia el 26 de
Puesto Pachacutec al Puesto Chiqueiza o a otro lugar
enero de 1995, cuando una Patrulla peruana intentaba
equivalente, alertó al Ecuador sobre las intenciones del
construir un helipuerto en la quebrada Fashin, en la ca-
Perú, tanto más que el Presidente Peruano, Alberto Fu-
becera del Río Cenepa. El ataque ecuatoriano por tie-
jimori, mantenía públicamente el discurso de que “no
rra, con apoyo de helicópteros de la FAE, logra tomar
habrá retroceso de ninguna especie”. (Academia Na-
la zona, que es denominada Base Norte. Las fuerzas
cional de Historia Militar del Ecuador 2020)
peruanas se movilizan y atacan la Base de Coangos el
29 de enero, y luego se amplían a las operaciones a
El Perú estaba debilitado por el conflicto inter-
toda la zona.
no y por el desgaste del régimen fujimorista, que se
encontraba en campaña para la reelección, y que trató
Tiwintza se convierte en el símbolo de las batallas
por el control territorial. La infantería y los soldados
de utilizar el conflicto como propaganda para un re-
de fuerzas especiales del Ecuador, al mando de los
spaldo
“nacionalista”. Si bien cuantitativamente se
coroneles Luis Hernández y Luis Aguas, en coordina-
mantenía la superioridad armamentista del Perú, Ec-
ción con el General Paco Moncayo en Patuca, desalo-
uador había logrado niveles de modernización en todas
jaron a los soldados peruanos del territorio defendido
las ramas, sobre todo en la Fuerza Aérea y en la defensa
por el Ecuador.
antiárea, que le daban una relativa superioridad táctica.
El triunfo, y sobre todo la imagen de la victoria,
La orientación apuntó a una guerra localizada en
se forjó en los cielos y en la tierra. El 10 de enero,
el Alto Cenepa. Un conflicto más ampliado era difícil
“las alas ecuatorianas se adornaron con los laureles
para el Ecuador. El relato de la nulidad del Protocolo
de la victoria, al derribar a tres aviones enemigos que
de Río de Janeiro se había condensado en la tesis de la
bombardeaban nuestras posiciones.” (Moncayo 1995)
inejecutabilidad del Protocolo, por la ausencia de la di-
La población, desde abajo fue testigo del estruendo del
visoria de aguas entre el Zamora y el Santiago, ya que
derribo de los aviones enemigos, y pudo festejar la vic-
el Río Cenepa no era un mero afluente menor, sino un
toria. En la disputa de sentido, esa era la prueba del
sistema hidrográfico independiente.
triunfo, junto a la disputa, material y virtual, sobre la
ocupación de Twinza.
La zona en disputa estaba en torno a la Cordillera
del Cóndor, convertida en territorio estratégico no sólo
El 17 de febrero se firma la Declaración de Paz
de límite territorial, sino también de rol económico por
de Itamaraty (Brasil) que dispone la separación de las
la presencia de reservas mineras. “El Ejército peruano
fuerzas beligerantes, bajo la vigilancia de los garan-
(…) conocía también de la inmensa riqueza aurífera y
tes. El 22 de febrero es el día más conflictivo, con
de otros metales además del petróleo que se acumula
numerosas bajas en ambos lados. El 28 de febrero se
en esa zona en cantidades significativas. (Academia
firma la Declaración de Montevideo, poniendo fin al
Nacional de Historia Militar del Ecuador 2020, 32)
conflicto armado.
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5. Imaginarios
La licuefacción de las fronteras económicas por el
mercado global y el predominio de las transnacionales,
Terminado el conflicto, empiezan dos nuevos procesos,
como poderes sin territorios, estuvo precedida por una
la interpretación de lo sucedido y el paso a las negocia-
modificación cultural profunda que minó las bases sóli-
ciones diplomáticas.
das de la sociedad tradicional. El camino seguido por la
La opinión pública ecuatoriana y las Fuerzas Arma-
modernidad fue la separación del individuo del seno de
das reconocen la Guerra del Cenepa, como la primera
la naturaleza y la comunidad, mediante un proceso de
desacralización y racionalización, que fue devorando
victoria del período republicano, condición para la paz:
los sucesivos espacios, niveles, instancias, para procla-
“la Gesta del Cenepa, la victoria militar que allanó el
mar el dominio humanista antropocéntrico. Hoy la di-
camino para suscribir un acuerdo de paz con el Perú,
solución afecta al propio individuo, en una dimensión
cerrando así una herida abierta desde el proceso de in-
post-humanista, y a las relaciones interindividuales,
dependencia de la América del Sur.” (Academia Nacio-
hasta crear un espacio autocentrado en el solipsismo
nal de Historia Militar del Ecuador 2020, 7)
del consumo, el éxito y la competencia. Actualmente,
las relaciones parten de la fuga ante el otro; no se tra-
Las negociaciones se dan en el marco del Proto-
ta siquiera del dominio directo como en el esclavismo
colo de Río de Janeiro y logran un resultado clave: el
o en el capitalismo productivo; es la disolución de la
Perú acepta la delimitación de la zona del conflicto,
propia relación en la suplantación mediadora de la in-
más allá del discurso de la tradición expansionista,
teligencia artificial, de las redes sociales, de la imagen
que llegó a plantear que se debía llevar la frontera
virtual. El poder se presenta como una microfísica del
hasta la Cordillera de los Andes. El Ecuador, de su
biopoder, la vida es el objeto y el medio.
lado, renuncia al reclamo de las fronteras basado en la
nulidad del Tratado de Río, acepta su vigencia como
En el plano político, la nación imaginada, el Estado
base para la delimitación de la zona en conflicto, ce-
territorial y la política se disuelven.
“El poder se ha
vuelto extraterritorial, y ya no está atado, ni siquiera
rrar las fronteras territoriales y finalizar el relato de la
detenido, por la resistencia del espacio. (…) El po-
“herida abierta”.
der puede moverse con la velocidad de la señal elec-
La Guerra del Alto Cenepa cierra un ciclo de la his-
trónica.” (Bauman, Modernidad líquida 2004, 16). El
toria del Estado-nación, la delimitación tardía y defini-
resultado es la porosidad de las fronteras territoriales
tiva de sus fronteras territoriales, bajo un hecho que es
de los Estados-nacionales. Surgen nuevos fenómenos
que trascienden las fronteras físicas, las migraciones,
celebrado como victorioso.
las mafias del tráfico de drogas, de armas, de perso-
nas, entrecruzados con la movilidad del capital finan-
6. Los cambios
ciero-especulativo. La propia naturaleza y objetivos de
La Guerra del Cenepa se da a destiempo, en el contexto
las guerras cambian: “ya no la conquista de un nuevo
de un nuevo ordenamiento mundial, a partir de la im-
territorio, sino la demolición de los muros que impe-
plosión de la Unión Soviética y la Caída del Muro de
dían los flujos de los nuevos poderes globales fluidos.
Berlín en la coyuntura del 1989-1991.
(…) Para que el poder fluya, el mundo debe estar libre
de trabas, barreras, fronteras fortificadas y controles.
El cambio político fundamental, desde fines del
Cualquier trama densa de nexos y relaciones sociales,
siglo pasado, es el debilitamiento de los Estados-na-
y particularmente una red estrecha con base territorial,
cionales. “El Estado fue degradándose desde la cate-
implica un obstáculo que debe ser eliminado.” (Bau-
goría de motor más poderoso de bienestar universal a
man, Modernidad líquida 2004, 17)
la de obstáculo más detestable, pérfido y molesto para
el progreso económico. (…) En la actualidad, (…) el
Aunque hay que tomar en cuenta, como muestra la
emergencia de los nuevos Muros en las fronteras Nor-
Estado se ha visto expropiado de una parte conside-
te-Sur, que estamos ante una globalización trunca y po-
rable (y creciente) de su antaño genuino o presunto
larizante, los libres flujos de los capitales y las mercan-
poder (para
hacer cosas), del que se han apro-
cías chocan con los controles y expulsiones de las olas
piado fuerzas supraestatales (globales) que operan en
de migrantes indeseados, “los mercados de productos
un «espacio de flujos» (Manuel Castells dixit) fuera de
y de capital tienden a ser mundializados. Mientras que
todo control político, mientras que el alcance efectivo
los mercados de trabajo permanecen segmentados.”
de las agencias y los organismos políticos existentes
(Amin 1997, 17)
no ha logrado ir más allá de las fronteras estatales.”
(Bauman y Bordoni, Estado de crisis 2016, 14 y 16)
La “Estrategia de Seguridad Nacional de Compro-
miso y Ampliación”, emitida por el Gobierno de Clin-
El Estado nacional sufre un doble asedio: por arri-
ton en 1994, en referencia a Latinoamérica, “resalta
ba, el poder supranacional, articulado en torno a la
las mejores condiciones de seguridad obtenidas por la
alianza competitiva Estados centrales-Organismos
resolución de las tensiones fronterizas, el control de las
multilaterales-Transnacionales; por abajo, las fracturas
insurgencias y la contención de las presiones para la
desde el descontento y la movilización social.
proliferación de armas, así como el triunfo sin prece-
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dentes de la democracia y de la economía de mercado.”
dizamiento de las guerras en las fronteras de conflictos
(Academia Nacional de Historia Militar del Ecuador
complejos que combinan las disputas civilizatorias con
2020, 13)
la lucha por el control de los recursos estratégicos, es-
pecialmente los recursos energéticos y el agua.
La Guerra del Cenepa, después del desenlace del
enfrentamiento entre dos Estados-nacionales, pasa a la
El largo conflicto colombiano, iniciado con el asesi-
dimensión global. En la mesa de negociaciones impera
nato de Eliecer Gaitán en 1949, entra a finales de los 90
la razón global del poder y del capital, la necesidad de
en la fase del Plan Colombia. Presentado, inicialmente
derribar muros para el flujo libre del mercado de mer-
como un Plan asistencial con políticas sociales en las
cancías y capitales.
zonas en conflicto, a partir del 2000 se transforma en
un Plan guerrerista para enfrentar a la narco-guerrilla,
El Acta de Brasilia, firmada por los Presidentes de
como la amenaza principal: “el tráfico de drogas ilícitas
los dos países, el 26 de octubre de 1998, después de la
se mostraba como la fuente primaria del conflicto co-
aprobación de los Congresos, finiquita el largo conflic-
lombiano.” El 73% de la ayuda norteamericana se orien-
to limítrofe, con la demarcación de los 78 kilómetros
ta al Ejército para incrementar las fuerzas “en las zonas
en conflicto. El símbolo de la desterritorialización está
de mayor presencia ofensiva de la guerrilla y los para-
en la definición del estatus de Tiwintza, el trofeo recla-
militares, pero con especial prioridad en el sur del país,
mado por los dos lados: el Acta reconoce la soberanía
pues esta era la zona que presentaba la mayor cantidad
de Perú, pero deja un kilómetro cuadrado para la ocu-
de cultivos de uso ilícito.” (Guevara 2015, 74 y 77)
pación simbólica del Ecuador.
Dentro de esta estrategia belicista se busca el in-
Esta ubicación de la Guerra del Cenepa en el cruce de
volucramiento del Ecuador, en un juego de “yunque y
dos tiempos fundamenta la ambigüedad de la memoria
martillo”, para cercar a las fuerzas guerrilleras. La de-
del acontecimiento: el festejo de la victoria y la raciona-
cisión principal del Ecuador fue no verse involucrado
lización pesarosa del Acuerdo para la paz. Pie de Foto
en un conflicto que no le correspondía; sin embargo, no
84 en (Vasco 2019, 153): “Área de combate defendida
se logra desarrollar una estrategia integral de paz.
con valentía, , nos permitió recuperar el honor y dignidad
nacional pero se perdió en la mesa de negociaciones.”
La estrategia global para enfrentar al nuevo enemi-
go, el terrorismo y el narcotráfico, parte de la “segu-
7. Las nuevas fronteras
rización” de la política y del Estado. “La fractura en-
Y entonces se podría aplicar el aforismo, “cuando te-
tre defensa y seguridad fundamenta el desplazamiento
níamos todas las respuestas, nos cambiaron las pregun-
institucional desde el papel central de las Fuerzas Ar-
tas.” La victoria del Cenepa cierra una larga historia
madas al papel principal de las fuerzas policiales, para
de inconclusión de la identidad nacional y de un senti-
combatir el terrorismo y el narcotráfico, articuladas
miento de reveses y derrotas; y, al mismo tiempo, des-
verticalmente a los acuerdos globales y a la regencia de
pués del Acta de Paz, abre el paso a las nuevas fronte-
los organismos de inteligencia americanos, la CIA y la
ras. El paso de la Frontera Sur a la Frontera Norte opera
DEA. (…) La Fuerza Pública y, en particular, las Fuer-
un reordenamiento profundo de la ubicación geopolíti-
zas Armadas, están en un profundo proceso de cambios,
ca de nuestro país. Entramos en una nueva lógica, los
a nivel local y mundial. En el centro está la redefinición
temas territoriales dan paso a los nuevos conflictos di-
del “monopolio de la violencia física legítima”, no sólo
fusos y complejos de las dinámicas globales.
dentro de un territorio, sino a nivel global. (Echeverría
Este desplazamiento afecta profundamente a la
2013)” (Saltos, Genealogía y modernización de las
identidad y la organización de las Fuerzas Armadas.
Fuerzas Armadas en Ecuador 2017, 58 y 59)
Estructuradas para responder al conflicto de la sobe-
En medio del clima optimista del “fin de la his-
ranía territorial, encuentran dificultades para enfrentar
toria”, a partir de 1994, la estrategia norteamericana
los problemas de las nuevas soberanías y responder a
privilegia en el Continente, la incorporación econó-
las presiones del poder global. Se produce una crisis
mica al modelo de “mercado libre”, primero mediante
de identidad por partida doble, desde dinámicas inter-
el impulso del ALCA (Área de Libre Comercio de las
nas y externas. Se produce una transición de la “guerra
convencional” a las “guerras irregulares o híbridas”,
Américas), y, luego, ante el fracaso de la estrategia
cuyo proceso de comprensión es muy complejo y mu-
continental en 2003, por la resistencia encabezada
cho más la preparación de capacidades, destrezas, en
por los “gobiernos progresistas”, mediante Tratados
nuevas planificaciones y escenarios.
de Libre Comercio bilaterales.
Estamos en un tiempo de incertidumbres, el tiempo
Paralelamente, para la readecuación geopolítica a las
global antes de la transición, marcado por la decaden-
nuevas condiciones post-guerra fría y la expansión de
cia de la modernidad capitalista-colonial, con semillas
la democracia, el dispositivo principal es la aprobación
débiles de alternativas; un tiempo de paradojas econó-
de los Libros Blancos de Defensa. “La OEA aprueba en
micas, ambientales, políticas, culturales. La paradoja
2002 un documento llamado ‘Adopción de lineamientos
de la guerra y la paz nos presenta el fracaso de la oferta
sobre la elaboración de documentos sobre política y doc-
de paz mundial después de la caída del Muro, y el agu-
trinas nacionales de defensa’” (Barrachina 2008)
Revista de la Academia de Guerra del Ejército Ecuatoriano, Volumen 13. Núm. 1 Abril 2020. pp. 25- 27
CENEPA: LA ÚLTIMA GUERRA TERRITORIAL
Un cambio clave se opera a raíz de los atentados
(Art. 158). La sujeción al poder civil (Art. 159). La eli-
de las Torres Gemelas en el 11S. Afecta fundamental-
minación del soporte económico para la autonomía de las
mente al carácter de la soberanía, que se transforma de
Fuerzas Armadas (Art. 162).” (Saltos, Genealogía y mo-
característica constitutiva de los Estados-nacionales, a
dernización de las Fuerzas Armadas en Ecuador 2017)
capacidad como resultado de la correlación de fuerzas
del poder mundial.
Ninguna de estas vías permite resolver la nueva
identidad y papel de las Fuerzas Armadas, en el marco
Este viraje se expresa en la Doctrina de Seguridad
de la democracia y de los cambios globales. Todavía
Nacional expedida por la Administración Bush (Bush
durante la crisis de inestabilidad política en los 90, las
2002): modifica las bases espacio-temporales de las
Fuerzas Armadas pueden presentarse como “garantes
estrategias político-militares. En referencia al tiempo,
de la democracia”. Progresivamente van perdiendo sus
consagra la doctrina de la guerra preventiva como el
puntos de referencia, incluso en la Frontera Norte, para
eje de la nueva Ley de Seguridad Nacional. En el espa-
garantizar una estrategia autónoma.
cio, establece una nueva división del mundo: clasifica
los países en países fuertes, los que tienen capacidad
Los acontecimientos por el secuestro y asesinato
de enfrentar las amenazas globales, especialmente el
de tres periodistas de El Comercio, el 26 de marzo de
terrorismo y el narcotráfico; países débiles, que nece-
2018, develan el problema de la Frontera: el vacío de
sitan el tutelaje de los gobiernos fuertes y en particular
los Estados en los dos lados, con la agudización de di-
de los Estados Unidos que tienen el destino manifiesto
versas formas de violencia y el control del territorio por
de proteger la paz y la democracia en el mundo; y los
fuerzas irregulares. El Ecuador carece de una estrate-
países basura, el “eje del mal”, que impulsan el terro-
gia orgánica para responder a los nuevos problemas. La
rismo y el narcotráfico.
ambigüedad entre una estrategia de negociación, exigi-
da por diversos sectores sociales y la Iglesia, y la incor-
En nuestro país se presentan dos cauces de respues-
poración a la estrategia belicista de Colombia-Estados
ta: “El caso de Ecuador es significativo por la rapidez
Unidos, termina por cobrar las vidas de los secuestra-
con que vivió el proceso de elaboración de libro. Ini-
dos. El desenlace de los hechos deja abierta la puerta
ciado oficialmente en mayo de 2002, (…) se publicó en
para la inclinación a una salida de guerra, mientras el
diciembre de ese mismo año.
(…) En este documento
discurso de la paz se queda en palabras y promesas de
se interpreta el concepto de la multidimensionalidad de
la atención a las poblaciones y los territorios limítrofes.
las amenazas ampliamente, señalándose que esta nueva
realidad justifica el que los ejércitos deban ser capaces
8. El asedio desde abajo
de abordar muchos de los aspectos que afectan a la se-
El Estado-nacional sufre también presiones y asedios
guridad de la nación y que en el contexto ecuatoriano no
desde abajo. La desproporción entre las demandas de
pueden ser desarrolladas más eficientemente por otras
la sociedad y las exigencias transnacionales ante la re-
agencias gubernamentales.” (Barrachina 2008). Esta lí-
ducida capacidad de respuesta de los gobiernos y los
nea se sigue en la administración de Lucio Gutiérrez; se
Estados de crisis, terminan por afectar no sólo a la le-
aborda la reelaboración del Libro Blanco de Defensa,
gitimidad de las representaciones, sino a la propia ins-
en una adecuación de la defensa y la seguridad a las
titucionalidad estatal y a la vigencia de la democracia.
concepciones sobre las nuevas amenazas globales.
En nuestro país, también desde abajo surgen dispu-
En la Asamblea Constituyente de 2008 se intro-
tas en torno a la superposición de soberanías, sobre todo
duce un cauce diferente: se instituye una concepción
en los territorios afectados por la explotación minera y
ampliada de la seguridad y se busca diferenciarla de la
la acumulación rentista. “La relación entre la sobera-
defensa, como el ámbito que corresponde a las Fuer-
nía nacional y la soberanía de los pueblos indígenas se
zas Armadas. “En la Constitución del 2008 se busca la
ha convertido en la frontera principal de los conflictos
salida a través de la superposición de diversas formas,
entre el Estado y los actores sociales, con presencia de
campos, territorios de soberanía. Soberanía popular
(Art 1.), soberanía territorial (Arts. 4 y 158), sobera-
nuevas formas de autoritarismo, juridización y crimina-
nía nacional y globalización (Arts. 5 y 416), soberanía
lización de la lucha social, sobre todo en la resistencia
regional (Art. 423), soberanía de los pueblos (Arts. 57
al extractivismo.” (Saltos, Genealogía y modernización
y 398), soberanía económica, alimentaria y energética
de las Fuerzas Armadas en Ecuador 2017)
(Arts. 281, 384 y 304).” (Saltos, Genealogía y moder-
La resistencia de los pueblos indígenas, con el res-
nización de las Fuerzas Armadas en Ecuador 2017)
paldo de sectores sociales, cuestiona el carácter uni-
“En la Constitución del 2008 se produce la disgre-
nacional del Estado y abre cauces a la visión del Es-
gación de la Fuerza Pública en dos cuerpos separados:
tado plurinacional. La Constitución del 2008 expresa
Las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional.” Respecto
el impase de este problema: reconoce formalmente el
a las Fuerzas Armadas, “cuatro cambios: la concentra-
carácter plurinacional del Estado, pero desactiva las
ción de la misión fundamental de las Fuerzas Armadas
formas de ejercerlo, sobre todo en el ejercicio de dife-
en “la defensa de la soberanía y la integridad territorial”,
rentes niveles de soberanía. En cada punto del conflic-
eliminando cualquier mención como defensoras de la de-
to, el monopolio de la violencia física legitimada entra
mocracia. La caracterización como servidores públicos
en cuestionamiento.
Revista de la Academia de Guerra del Ejército Ecuatoriano, Volumen 13. Núm. 1 Abril 2020. pp. 26- 27
CENEPA: LA ÚLTIMA GUERRA TERRITORIAL
Los acontecimientos de octubre 2019 se presentan
9. Después de 25 años: la disyuntiva
como un punto de ruptura en el funcionamiento del
Y en medio de estas disputas, regresa la pregunta sobre
Estado. El símbolo es el Decreto 883, pero el pro-
el papel de las Fuerzas Armadas ante los conflictos so-
blema es el modelo neoliberal, no sólo económico,
ciales internos y ante los cambios globales.
sino ideológico, y el funcionamiento de la democracia
liberal-representativa.
Los discursos de los voceros oficiales del Gobier-
no de Lenin Moreno, tanto de la Ministra de Gobierno
El punto de conflicto es el cruce de diversas formas
como del Ministro de Defensa, apuntan al alineamien-
de violencia: la irrupción de actos de violencia “divina”
to con el retorno a una nueva versión de la Doctrina
(Benjamin 2001) como un “estallido social” contra los
de la Seguridad Nacional que señala como la amenaza
varios rostros de la desigualdad y la injusticia, la rebe-
principal la presencia de fuerzas subversivas internas,
lión de las masas que acuden a la democracia de la calle
identificadas con la movilización social indígena. Esta
para expresar su descontento ante la incapacidad de las
visión entra en contradicción con la tradición civilis-
instancias democráticas representativas para resolver
ta de las Fuerzas Armadas que, sobre todo, a partir de
pacíficamente las demandas sociales. La presencia de
la alianza estratégica establecida en la preparación y
violencias instrumentales desde dos polos de poder:
ejecución de la Guerra del Cenepa, fundamentaron la
la estrategia de desestabilización de sectores vincula-
visión de que “las Fuerzas Armadas jamás dirigirán las
dos al correismo; y el ataque violento del Gobierno a
las movilizaciones masivas, bajo el argumento, en un
armas contra su propio pueblo.”
juego de espejos, de enfrentar la desestabilización. El
El reto democrático para las Fuerzas Armadas se
acontecimiento radica en la irrupción de la “autonomía”
presenta como una pregunta sobre su propia identidad
de la movilización social ante los polos de poder y sus
hacia adentro y hacia afuera.
proyectos, tanto el modelo de libre mercado, como el
modelo estatista. (Saltos y otros, Octubre 2020)
La memoria de la victoria del Cenepa no puede
quedarse en la celebración. El pasado regresa en es-
Se opera el paso desde los dispositivos represivos
piral al presente, para poder encontrar pistas para las
del período de Correa, centrados en el control pre-
respuestas actuales y la proyección al futuro. El primer
ventivo y el descabezamiento de las movilizaciones,
paso es un tiempo de reflexión, para construir una doc-
bajo una estrategia disciplinaria y la predominancia de
los aparatos de seguridad e inteligencia; a las nuevas
trina y una estrategia propia, a partir de los aportes de
formas de represión masiva, basados en las doctrinas
las ciencias en el mundo y la originalidad de nuestro
israelitas y las variaciones chilenas sobre el control de
país y nuestra América; reconocer a las Fuerzas Arma-
pueblos y masas, que tienen como actores principales
das, no sólo como una institución estatal, sino como
a las fuerzas policiales.
una institución asentada en la sociedad.
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